La extensión de las formas femeninas a los nombres que designan profesiones o actividades
desempenadas por mujeres es, en buena medida, un hecho relativamente reciente. La lengua va acogiendo,
en ciertos medios, voces como bedela, coronela, edila, fiscala, jueza, médica o plomera, pero estas y otras
voces similares han tenido desigual aceptación, generalmente, en función de factores geográficos y sociales,
además de propiamente morfológicos.
Han desaparecido casi por completo los sustantivos femeninos que designaban antiguamente a la
esposa del que ejercia ciertos cargos (la coronela, la gobernadora, la jueza), y se han impuesto los significados
en los que estos nombres se refieren a la mujer que pasa a ejercerlos.
REAL ACADEMIA ESPANOLA; ASOCIACIÓN DE ACADEMIAS DE LA LENGUA ESPANOLA. El buen uso del espafiol.
Barcelona: Espasa, 2013. p. 142.
Sefala la alternativa correcta de acuerdo con el texto.
A) Los autores prescriben el uso del nombre “coronela” para designar a la cónyuge del “coronel”.
B) No está aceptado el uso de “médica” para denominar a la mujer que ejerce la medicina.
C) La aceptación de palabras como “jueza” depende de la publicación de normas gramaticales.
D) Las transformaciones lingúísticas ilustradas por “fiscala” se relacionan con cambios sociales.